miércoles, 2 de diciembre de 2015

Berenjenas rellenas de arroz

Para esta receta no necesitas ingredientes complicados, es un plato económico pero muy completo. Prepara una comida de forma fácil y rápida para llevar al trabajo, será un táper perfecto para comer sano y con sabor. Esta hortaliza tan peculiar podemos encontrarla todo el año en las tiendas, gracias a los cultivos en invernadero, pero su temporada real abarca de septiembre hasta diciembre. En estos meses la encontraréis bien hermosa y a precios muy económicos. Su llegada a España se remonta a la Edad Media, traída por comerciantes árabes, desde tierras de Oriente, situando su origen en la India. Su cultivo se extendió por todos los países bañados por el Mediterráneo, y contribuyó a paliar muchas épocas de hambrunas. La variedad que solemos encontramos en España es “Globosa”, con forma esférica o de globo, de un tono morado oscuro. Y dentro de nuestro país, muchos/as conoceréis las “Berenjenas de Almagro”, en Ciudad Real, que se preparan encurtidas. Esta receta y manera de conservarlas es gracias a los árabes.La berenjena es una verdura muy agradecida, que puede prepararse de infinidad de maneras, además debido a su forma, es perfecta para rellenar con otros ingredientes. En el blog ya tenemos otras recetas en este sentido, como las berenjenas rellenas de carne picada o las berenjenas rellenas de carne con bechamel. Hoy vamos a cambiar el ingrediente principal y las rellenaremos con un arroz de verduras. Luego les daremos el toque final en el horno, gratinando queso para hacerlas aún más apetitosas. En este caso aquí tienes una receta vegetariana ideal para niños, unas berenjenas rellenas de arroz y verduras muy sanas y jugosas.

Ingredientes

4 berenjenas
300 gr. de arroz de grano redondo
1 cebolla grande
2 tomates
1 diente de ajo
200 gr. de champiñones
150 gr. de queso rallado (para gratinar)
Aceite de oliva virgen extra
Sal y pimienta negra recién molida (al gusto)



Preparación de las berenjenas rellenas de arroz

Cuando cocinamos con berenjenas, comprobamos que su carne interior se oxida ligeramente en contacto con el aire. De un color blanco pasa a un verde suave, pero no os preocupéis, sigue conservando todo su sabor y textura.

Lavamos las berenjenas. Les retiramos el rabito y las hojas. Las cortamos por la mitad (longitudinalmente). En una cazuela con abundante agua con sal, añadimos las berenjenas y las dejamos reposar en ella 15 minutos. Así les quitamos el amargor.

Pasado el tiempo, las retiramos y secamos. En otras recetas las precocinamos un tiempo en el horno pero también podemos cocerlas. Vaciamos las berenjenas, dejando un borde grueso junto con la piel, para que aguanten bien luego en el horno.

La pulpa de berenjena resultante la reservamos en un plato, tapando con film transparente. Cocemos el resto durante 5 min en agua hirviendo. Retiramos y reservamos.

Vamos con el arroz. Picamos en “brunoise” la cebolla, el ajo, los tomates y la pulpa de berenjena. Limpiamos los champiñones y los picamos en láminas. En una sartén con aceite de oliva virgen extra, sofreímos primero la cebolla y el ajo. Luego vamos añadiendo el tomate, la berenjena y finalmente los champiñones. Salpimentamos al gusto.

Con el sofrito preparado, añadimos el arroz,  2 partes de agua, y cocinamos a fuego medio 15/17 minutos. Salamos al gusto. Vamos comprobando el punto del arroz y el nivel del líquido, dependiendo de lo que apure vuestra cocina.

Precalentamos el horno 5 minutos a 200º C. Hecho el arroz, vamos rellenando las mitades de las berenjenas y las colocamos en una fuente de horno. Añadimos por encima del arroz una capa generosa de queso rallado, especial para gratinar. Colocamos en la bandeja central y gratinamos 5 min. a 200º C, o hasta que veamos que el queso está derretido y va cogiendo un color tostado.

Servimos bien caliente en la mesa, y a disfrutar de este plato tan delicioso. ¡Está de rechupete!, os lo aseguro, en casa no sobró ni la primera.Las berenjenas rellenas con arroz con verduras pueden amoldarse a cualquier menú, dependiendo de su tamaño. Podemos servirlas acompañando a un plato de proteínas como carne, pescado o legumbres, o pueden ser un plato único ligero ya que son muy saciantes.

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