miércoles, 6 de agosto de 2014

LA VITAMINA E

La vitamina E es una vitamina liposoluble también conocida como tocoferol o vitamina restauradora de la fertilidad, agrupa una serie de moléculas muy similares entre sí, entre las que destacan, los tocoferoles y los tocotrienoles. El más potente es el α-tocoferol y la ingesta de vitamina E se expresa como mg equivalentes de α-tocoferol.
ALIMENTOS QUE CONTIENEN LA VITAMINA E

La vitamina E se encuentra principalmente en alimentos de origen vegetal y de hojas verdes: brócoli, espinacas, soja, el germen de trigo, levadura de cerveza, cereales integrales, semillas, frutos secos y fundamentalmente en los aceites vegetales. En cuanto a los alimentos de origen animal, las yemas de huevo y los pescados son una fuente muy rica de vitamina E.



  • Aceite de Girasol (50-62 mg/100g)
  • Aceite de nueces (39 mg/100 g)
  • Aceite de sésamo (28 mg/100 g)
  • Avellanas (27 mg/ 100 g)
  • Aceite de soja (17-25 mg/100 g)
  • Nueces (25 mg/100 g)
  • Almendras (25 mg/100 g)
  • Aceite de Palma (25 mg/100 g)
  • Margarina (14 mg/100 g)
  • Aceite de Oliva (12 mg/100 g)
  • Escorzonera (6 mg/100 g)


El papel principal de la vitamina E es actuar como antioxidante captador de radicales libres en las células y la sangre (elementos que aceleran el envejecimiento y deterioro celular), los cuales son generados por la oxidación de las grasas, contaminación ambiental, el humo del tabaco y los pesticidas.


Asimismo, tienen otras funciones como:

  • Evitar la destrucción de las vitaminas A y C, y del mineral selenio.
  • Aliviar la fatiga.
  • Prevenir y disolver coágulos sanguíneos.
  • Proteger a los pulmones de la contaminación.
  • Proporcionar oxígeno al organismo.
  • Fortalecer al sistema inmunológico
  • Retardar el envejecimiento.
  • Acelerar la curación de quemaduras.
  • Prevenir abortos espontáneos y calambres en piernas.
  • Permitir que las funciones metabólicas de hígado y tejido muscular se realicen adecuadamente.

Por su alto poder antioxidante veremos que tiene un amplio uso en la cosmética, su alta capacidad de incrementar el flujo sanguíneo, oxigenar y regenerar los tejidos, aporta elasticidad y reduce la formación de arrugas.

Su uso también ha sido extendido a los shampoos, acondicionadores y productos de tratamiento porque ayuda a combatir los radicales libres que dañan la estructura capilar, evitando que el cabello se rompa y caiga.
DEFICIENCIAS Y EXCESOS

DEFICIENCIAS

La deficiencia de esta vitamina es poco conocida y se da cuando no se ingiere ningún alimento rico en vitamina E, también en casos de personas con mala absorción de grasa, diarrea o enfermedades crónicas del hígado debido a la incapacidad de absorberla y transportarla por el organismo.
En niños prematuros puede existir también la deficiencia puesto que nacen con bajas reservas de vitaminas.
En estos casos, es importante saber que cuando se tiene carencia de vitamina E pueden presentarse los siguientes problemas:

Destrucción de glóbulos rojos (elementos de la sangre que se encargan de transportar el oxígeno a todo el cuerpo) y, en consecuencia, anemia.
Debilidad muscular.
Trastornos en la reproducción.

EXCESOS

Es relativamente atóxica y no parece producir efectos nocivos aunque en dosis muy elevadas puede incrementar la presión arterial.


Consumos de Vitamina E

La ingestión diaria recomendada es para un adulto de 10 mg/dia de α-tocoferol , y de 3 mg/dia para un niño recién nacido y de 12 µ/g para mujeres embarazadas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por opinar.